viernes, 18 de diciembre de 2009

Se difumina la posibilidad de llegar a un acuerdo


Otro tema en disputa es la fecha en la que se debe de partir para lograr objetivos de mitigación de gases y de efecto invernadero. Europa considera que 1990 y Estados Unidos fija la fecha en el 2005.

El Presidente Felipe Calderón será el orador que cierre la reunión de líderes mundiales en la Cumbre sobre Cambio Climático en Copenhague, la cual, de acuerdo a voceros, se encamina a concluir sin ningún tipo de acuerdo debido que ni Estados Unidos ni China aceptaron modificar sus posturas para reducir las emisiones de contaminantes en el 2020.

A lo largo del día, los Jefes de Estado, Gobernadores y Ministros, así como representantes de la Organización de las Naciones Unidas, para redactar lo que será únicamente una declaratoria política, sin carácter de obligatoriedad, en la que todas las naciones aseguran estar conscientes de que deben reducir la producción de bióxido de carbono y que debe haber apoyo a los países pobres.

Voceros informan que la cumbre mundial se encamina a su fracaso a pesar de la emergencia mundial de proteger a la humanidad. Las autoridades mexicanas hacen esfuerzos para que durante la XVI Conferencia de las Partes, que se celebrara en el 2010 en nuestro país, se llegue con acuerdos previos, amarrados ya desde Copenhague.

El mandatario mexicano efectúo, hasta entrada la madrugada del viernes, un fuerte cabildeo para que se apruebe o por lo menos se sentaran las bases para constituir un fondo de financiamiento para reducir las emisiones contaminantes, el famoso Fondo Verde.

Pero aun cuando la propuesta mexicana fue avalada por Australia, Noruega y Gran Bretaña, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama llegó con la firme intención de lanzar una alternativa diferente ya que su país sólo está dispuesto a aportar recursos de manera voluntaria y no de forma obligatoria.

Obama se manifestó por recaudar, junto con otros países, 100 mil millones de dólares al año para el 2020 para ayudar a los países más pobres a combatir el cambio climático.

Además el mandatario estadunidense afirmó que la voluntad mundial para enfrentar el clima global "está en juego" e insistió en que cualquier acuerdo deberá contemplar la transparencia entre las naciones.

Y es que uno de los temas de confrontación entre Estados Unidos y China, es justamente el de la transparencia. China dejó en la cumbre muy en claro que aceptar la vigilancia de las acciones que está haciendo para disminuir las emisiones contaminantes, es un atentado a su soberanía nacional.
Pero además China considera injusto que Estados Unidos tenga varias décadas contaminando al mundo y ahora se pretenda imponer un candado a su país en su desarrollo, cuando tiene a penas una década de haberse convertido en uno de los mayores emisores de contaminantes en el mundo.
A nivel mundial, Estados Unidos y China generan el 40 por ciento de emisiones contaminantes.

Otro tema en disputa es la fecha en la que se debe de partir para lograr objetivos de mitigación de gases y de efecto invernadero. Europa considera que 1990 y Estados Unidos fija la fecha en el 2005.

Aun no se desecha la posibilidad de que una vez concluida la cumbre se queden representantes de los líderes, lo que marcaría el rotundo fracaso de Copenhague.
Copenhague, Dinamarca