jueves, 1 de octubre de 2009

Secuestro no someterá ni humillará a la autoridad, afirma Calderón


El jefe del Ejecutivo urgió a reconstruir las instituciones en el país, ya que reconoció que existe debilidad en el personal y si no se arregla el problema de fondo no terminarán nunca esta tarea.


Al reconocer que hay debilidad en el personal de las instituciones del país, el presidente Felipe Calderón sentenció que su gobierno no permitirá que el secuestro someta a la sociedad ni que humille o arrodille a la autoridad.
Al clausurar el foro "Víctimas del secuestro. Es hora de escuchar", ofreció impulsar un cambio de fondo sin importar el tiempo que lleve o los costos que se deban asumir, pues es tiempo de que la ley se equilibre en favor de las víctimas de ese flagelo, que es la principal amenaza del país.
"Podemos estar cazando y capturando criminales, pero sino arreglamos el problema de fondo", que es tener policías, agentes del Ministerio Público y jueces débiles y corruptos, "no vamos a terminar nunca esta tarea, y necesitamos una reconstrucción institucional en el país", sentenció.
Calderón Hinojosa, acompañado de su esposa Margarita Zalava, destacó que la debilidad institucional permitió un relajamiento del entramado fundamental de la sociedad.
Ello propició un campo de cultivo donde el delito germinó y creció exponencialmente hasta alcanzar los niveles que se viven en el territorio nacional.
Incluso, abundó, ese debilitamiento propició que se multiplicaran los hechos de negligencia y de omisión de complicidad, los cuales acabaron "dándole la puntilla" a la estabilidad de la seguridad en México.
Ante víctimas y sus familiares, así como autoridades y funcionarios públicos, el titular del Ejecutivo federal manifestó que cuando en la policía se incubó el crimen organizado, se exacerbó el problema de inseguridad.
Por ello destacó que el combate al delito requiere de instituciones de seguridad y de justicia eficaces "que aún no tenemos, pero también y, sobre todo, requiere de una sociedad fuerte y participativa".
Felipe Calderón aceptó que no se podrá reconstruir la autoridad si no hay una exigencia y un ímpetu ciudadano que pueda impulsarla y reconstruirla.
Dijo que para fortalecerla su gobierno ha echado mano de todo lo que tiene: de la Policía Federal, que ha incrementado de seis mil a casi 30 mil su número de elementos en tres años, así como del Ejército y de la Marina.
Ofreció impulsar varias reformas, entre ellas la del Sistema de Justicia Penal, para que las víctimas no tengan que ver a quien los secuestró, pues tienen derecho a mantener su seguridad y su identidad hasta donde el Estado mismo sea capaz de garantizarla.
En la sede del Instituto Nacional de Rehabilitación y ante el presidente de la Organización México SOS, Alejandro Martí, y la titular de México Unido Contra la Delincuencia, Ana Franco de Wattnem, refrendó el compromiso de seguir trabajando para combatir sin tregua el secuestro.
Resaltó la importancia de trabajar unidos para poner alto a este flagelo, no sólo en el marco del Acuerdo por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad, sino en la realidad del dolor y de la injusticia de quienes han sido víctimas de este mal.
Sobre el resultado del foro, se comprometió a llevar las conclusiones y entregar copia de ellas a los poderes Legislativo y Judicial, así como a las procuradurías.
La meta es hacer un México libre del secuestro y de la delincuencia, que nunca debió llegar a los niveles a los que ha llegado en el país, expuso el presidente Calderón.
A su vez, Alejandro Martí dio lectura de algunas de las conclusiones a las que se llegaron en el foro, entre ellas la creación de un Código Penal y de Procedimientos Penales único para toda la República y la designación de un zar antisecuestros.
Además la creación de una base de datos con información unificada para identificar a los afectados y los victimarios, la creación de una ley federal de víctimas y tipificación del delito de tortura para particulares.
Martí García ratificó la voluntad férrea para que ese delito se borre, pero sobre todo de unir esfuerzos para ir estado por estado a promover que las iniciativas y los convenios se cumplan.
El empresario destacó también la necesidad de promover la incautación de bienes a ofensores, familiares y prestanombres, así como de protección de víctimas de plagio y sus familiares para no tener la obligación de estar en contacto directo con los agresores.
En su turno, Franco de Wattnem también dio a conocer algunas de las conclusiones a las que se llegó en el foro que tiene que ver con la revisión de los perfiles de los servidores públicos especializados en atención a victimas.
En el acto se planteó la necesidad de impulsar la figura de un mediador en el proceso de denuncia y en especial que se considere al secuestro como un problema nacional y de Estado.
Un punto central tiene que ver con el hecho de que lo medios de comunicación pongan cuidado en cómo abordan los programas para niños, que son víctimas indirectas del secuestro, y que la prensa reafirme su compromiso social de dar un adecuado seguimiento a los casos al confrontar a las autoridades.
Estuvieron presentes los secretarios de Gobernación, Fernando Gómez Mont; Seguridad Pública, Genaro García Luna; el procurador general de la República, Arturo Chávez Chávez, y el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortiz Mayagoitia.
También asistieron los presidente de la Mesa Directiva del Senado, Carlos Navarrete Ruiz, y de la Cámara de Diputados, Francisco Ramírez Acuña, así como el ombudsman nacional, José Luis Soberanes Fernández. México, D.F.